A menos de un mes de liberar el uso de mascarillas al aire libre, en India se han vuelto a instalar los mandatos obligatorios de mascarilla y la multa de 500 rupias por no llevarla puesta en lugares públicos.
A principios de abril, siguiendo el cronograma de desmantelar medidas preventivas de muchos países, los gobiernos federados de India determinaron el uso voluntario de mascarillas en espacios abiertos, al tiempo que permitieron el retorno presencial a clases, trabajos y recreación en lugares cerrados. Para entonces, India registraba una curva descendente, con 1.286 nuevos casos diarios y 0,92 casos por millón de habitantes, en el promedio móvil de 7 días.
Sin embargo el 6 de abril sonó una alarma. Se hizo público que una muestra secuenciada a fines de febrero, de un viajero proveniente de Sudáfrica, había dado positivo a XE (recombinante de Ómicron BA.1 y BA.2) y que las autoridades de salud nacionales sabían de ella desde marzo. El análisis genómico fue realizado en Bombai, que informó a las autoridades de salud central. Sin embargo en Dehli se descartó la muestra, señalando que había sido mal etiquetada en la base de datos mundial GISAID.
Pese al tiempo transcurrido y al hecho de que el mutante XE es 10% más transmisible que Ómicron original, autoridades y expertos pro normalidad insistieron en informar a la población que el uso de las mascarillas al aire libre debía continuar siendo voluntario. Lo contrario era una exageración y no había motivo de alarma, debido a que el alto nivel de vacunación y de infección natural proveía la inmunidad necesaria y además el mutante XE no provoca cuadros más graves, se dijo.
Ya el día 8 hubo científicos que llamaron a retornar a la obligatoriedad de la mascarilla pues estimaron que XE podría impulsar una Cuarta Ola en India y lamentaron que "las autoridades, que están en modo de negación, podrían ser perjudiciales para la salud de la población".
Pero la baja de casos continuó y con ello la responsabilidad individual de elegir si usar o no máscaras al aire libre. El descenso se detuvo en 975 diarios (promedio en 7 días) el 16 de abril y luego India comenzó a subir.
Ayer el segundo país con más habitantes del planeta registró 1.368 casos confirmados promedio y ante este "aumento repentino", especialmente en Nueva Dehli, el estado capital y distritos de los estados vecinos de Haryana y Uttar Pradesh retrocedieron en la liberación de mascarillas y llamaron a preferir las de alta filtración de aerosoles, como N95.
Ahora se habla en los medios de apresuramiento en relajar medidas y que las mascarillas son tan importantes para prevenir una nueva ola como las vacunas.
Chile está terminando su Cuarta Ola. El 12 de abril cuando se flexibilizó el uso de mascarillas al aire libre, nuestro país registraba una curva descendente con 3.416 nuevos casos diarios confirmados de COVID-19 y 178 por millón de habitantes en el promedio móvil de 7 días.
Escrito por Lucía Escobar
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