El gobierno concretó el anuncio del nuevo plan Paso a Paso. Desde el 1 de octubre habrán 5 Fases de contención de la epidemia Covid-19: Restricción, Transición, Preparación, Apertura inicial y Apertura avanzada, siendo lo más llamativo de este cambio que la Fase 1 ya no será Cuarentena y la medida sanitaria como tal se excluye como herramienta del control de la pandemia. 📁
Algo que venía ocurriendo desde hace tiempo en los hechos. Primero porque no se garantizó que las cuarentenas fueran efectivas, es decir que la población pudiera reducir la movilidad en un mínimo de 60% con condiciones económicas que lo permitieran. El máximo alcanzado fue 50,6% en abril de 2020, cuando el temor de las personas a la pandemia fue más fuerte que las consideraciones económicas. 📁
En ese entonces la cuarentena fue en la Región Metropolitana y afectó al 15% de la población. En abril de este año, el peor momento en toda la pandemia, la cuarentena abarcó al 87% de la población, pero la movilidad se redujo apenas en 38,7%, es decir pese a que se habían impuesto, la falta del control y garantías para que las personas pudieran acatarlas, las convertía ya en una medida inútil.
Segundo, porque desde que comenzó la baja de contagios a mediados de este año, las cuarentenas desaparecieron del mapa de Chile. Actualmente sólo Contulmo está en fase 2, otras 28 comunas en Fase 3. El resto del país se encuentra en Fase 4. No hay ninguna comuna en Fase 1 o Cuarentena pues según los indicadores del Ministerio de Salud no se justifica.
Incidencia, tasa de positividad, R efectivo, como el número de casos por millón y disponibilidad de camas hospitalarias se utilizan en Chile y todos los países para medir la temperatura del Covid-19 y determinar qué medidas sanitarias se implementan en cada comunidad para reducir el riesgo de contagio.
Así, cuarentenas, permisos de movilidad y aforos son básicamente lo mismo: límites al desplazamiento y contacto entre personas para que, en caso de que ocurra un brote, pueda ser controlable.
Sin embargo desde el inicio de la pandemia sólo la Cuarentena fue asimilada al Estado de Excepción o Catástrofe. Ahora el anuncio de Sebastián Piñera sobre que no se renovará el Estado de Excepción, el más largo de nuestra historia, a partir de este jueves 30 de septiembre ha sido explicado profusamente por el gobierno y los medios de comunicación como el fin del toque de queda - rechazado por especialistas como parte de una estrategia de sanidad - y las cuarentenas comunales o regionales.
Ni el Decreto 104 que declaró Estado de Excepción constitucional el 18 de marzo de 2020, ni la Ley 18.415 de la dictadura para permitir que se promulguen estos decretos eran necesarios para determinar cualquier medida sanitaria ante una epidemia, porque ya eso estaba establecido en el principal cuerpo regulador de la Salud en Chile. 📁
Como se lee en el artículo 36 del Código Sanitario que data de 1967:
"Cuando parte del territorio se viere amenazada o invadida por una epidemia, o por el aumento notable de una enfermedad, o cuando se produjeren emergencias que signifiquen grave riesgo a la salud o la vida de los habitantes, podrá el Presidente de la República, previo informe del Servicio Nacional de Salud (actual Ministerio) otorgar al Director General (actual ministro) facultades extraordinarias para evitar la propagación del mal o enfrentar la emergencia".
Es decir en el caso específico de una amenaza a la salud de la población, todo el procedimiento requerido para determinar las medidas sanitarias es la entrega de facultades extraordinarias del Presidente a su Ministro de Salud, previo un informe de la situación emitido por el propio ministerio. La legislación previó así un trámite expedito, que no requiere tampoco la anuencia del Senado para prolongarse, como es el caso de los Estados de Excepción.
El último, contenido en el Decreto 104, mantiene el sentido de los anteriores: entregar el control social en una emergencia a las Fuerzas Armadas. En este decreto específico los Jefes de Defensa Nacional pueden actuar en algunas materias, como controlar el acceso en la zona declarada en catástrofe, sin embargo la autoridad para determinar las medidas sanitarias no se les entrega.
Dice el artículo cuarto: "los Jefes de la Defensa Nacional deberán tomar en consideración las medidas sanitarias dispuestas para evitar la propagación del Covid-19, en actos administrativos dictados por el Ministro de Salud, en el ejercicio de las facultades previstas en el artículo precedente". Aún aquí, es la autoridad sanitaria la que define las medidas. 📁
Como dijimos, determinar el uso de una medida sanitaria depende de los indicadores, los que ya no están tan buenos como cuando se inició el proceso de liberación de restricciones.
Según el último informe Covid-19 de la Escuela de Salud Publica de la Universidad de Chile, que elabora el Doctor Mauricio Canals, "se ensombreció el panorama".
El análisis del 26 de septiembre considera preocupante el aumento de incidencia y de la positividad y alerta especialmente sobre una elevación importante de Re, sobre 1 "sólo comparable al de enero de 2021 y de abril de 2020 (...) Hay signos de aceleración del contagio con Re muy alto (Re > 1,2, en Chile en general y en 15 regiones simultáneamente".
Y agrega "de mantenerse esta aceleración podríamos incrementar los casos en alrededor de un 20% semanal. Si todo sigue igual, ahora el pronóstico ya no es bueno para el 11/10. Proyectamos alrededor de 1.500 casos diarios a nivel nacional y tal vez alrededor de 1.000 en RM. Si sigue así, el proceso puede ser similar al de 2020, lo que cuestionaría nuestro nivel de inmunidad poblacional. En la RM los casos/día este año tienden a igualarse a los de 2020. Hay que estar muy alertas. A recuperar la percepción de riesgo. "
¿Podrán necesitarse cuarentenas nuevamente si los indicadores comunales y regionales empeoran? No es posible saberlo, pero si eso ocurre, la ciudadanía debe conocer que las medidas sanitarias no se extinguen junto a un decreto de Estado de Excepción.
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