“Ni técnica ni sanitariamente el gobierno pudo implementar cuatro salas para que sesionara la Convención Constitucional con 155 representantes adultos, y es el mismo gobierno que planea la vuelta a clases presencial a fines de julio, en todo el país”, afirma el Doctor en Psicología y magíster en Salud Pública y Global, Gonzalo Bacigalupe
La permanente iniciativa del ministro de Educación Raúl Figueroa cobró nuevos bríos en el último mes. Gracias a la propuesta de una nueva estrategia sanitaria del Colegio Médico que incluyó el retorno a clases en fase 1 (que realmente corresponde a fase 2 en el plan Paso a Paso) el gobierno aprovechó de instalar el concepto de abrir colegios en comunas en cualquier etapa de confinamiento. La idea fue reforzada por los resultados de las Jornadas de Escucha Ciudadana sobre Educación y Pandemia, cuyo fin fue dar sustento ciudadano a los anunciados cambios de estrategia, que aún no se presentan.
“El sistema educativo debiese estar separado de los vaivenes propios del plan Paso a Paso” dijo el Ministro Figueroa el pasado fin de semana, transparentando el enfoque de la “nueva presencialidad” que se pretende iniciar a fines de las vacaciones de invierno.
- Esto ha sido un espectáculo para dar soporte a una decisión que claramente está siendo tomada porque hay intereses económicos fuertes en el contexto educacional, tanto de los sostenedores como de la actividad económica en general, que necesita tener a los niños en las escuelas para facilitar el trabajo de sus padres, dice Bacigalupe y enfatiza:
- Todos queremos que los niños y niñas y adolescentes vuelvan a las clases presenciales. Eso es absolutamente necesario, pero todavía la incidencia es muy alta y el retorno solo puede fortalecerla, junto con los contagios entre niños. La variante Delta es particularmente peligrosa para ellos, sabemos que ya está acá y en otros países ha sido responsable por el aumento de casos en menores de edad.
"Este año van a ser muy pocas las escuelas que realmente se puedan abrir y puedan ofrecer educación de modo seguro, eso hay que asumirlo", opina el especialista en Salud Pública quien sí cree que es posible abrir escuelas, pero como un lugar de encuentro y centrado en la salud mental de los estudiantes que puedan asistir, más que en la actividad escolar normal.
- No se puede abrir para tener clases de modo regular debido a que las escuelas no están preparadas, entre otras cosas, para medir el CO2 en las salas de clases. Pero sí se pueden abrir colegios de forma comunitaria, que sean lugares sociales como una manera de que los niños puedan tener algunas actividades con distancia física, fortalezcan sus vínculos y se puedan encontrar . Pero claramente eso no es lo que está en las mentes del ministerio.
Hay escuelas privadas que en este momento tienen combinación de actividades presenciales y digitales y donde ha habido una rápida detección de contagios y casos estrechos, pero para cuando eso suceda en escuelas públicas o subvencionadas no hay un plan, dice Bacigalupe.
- Claramente no se ha hecho una planificación sobre qué hacer cuando se detecta un contacto estrecho de modo que puedan volver los niños a la forma virtual, como tampoco hay claridad sobre con qué indicadores se vuelve a la escuela o se suspenden las clases. Desde un punto de vista educacional es muy importante que exista y se comunique un plan con muchas semanas de anticipación, para que las familias puedan prepararse, planifiquen y también conozcan con qué indicadores se vuelve a la escuela.
- No se puede anunciar con unas semanas de anticipación lo que se va a hacer con las escuelas - recalca - y si lo que vemos es bastante errático, es porque esas decisiones no se toman en función de los indicadores. Para abrir colegios y liberar otros espacios públicos, que son necesarios también, se requieren indicadores claros, de una continua baja en los contagios, pero esos indicadores no existen.
Para Gonzalo Bacigalupe el proceso constituyente que está comenzando - a pesar de la negligente instalación del gobierno - debe motivar la discusión sobre el modelo de educación que Chile necesita:
- En este momento crucial, la comunidad educativa y sus actores deberían estar pensando cómo diseñar la educación para Chile, no solo en términos de la medición tradicional y en un modelo donde el centro de las decisiones se toman en el oasis. Si realmente creemos que se necesita reformular la educación y apoyar a los niños y niñas tenemos que pensar cuál es modelo educacional que queremos y este es el momento para involucrarnos. Es claro que la educación chilena está en crisis y se intensificó durante la pandemia, y justamente el proceso constituyente es un impulso para pensarlo, en vez de pensar solamente en abrir las escuelas.
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