"Esto es un crimen por omisión o intención. Sabemos lo que se debe hacer para salvar vidas pero no se hace", afirma el Doctor en Psicología, magíster en Salud Pública y Global de Harvard y candidato a Constituyente independiente Gonzalo Bacigalupe.
Durante meses el salubrista ha advertido que la gestión del Ministerio de Salud para enfrentar la pandemia, que actualmente cobra la vida de más de cien chilenos al día, no es un error sino un diseño.
En "Necropolítica: Paso a Paso hacia una muerte lenta" columna que escribió en septiembre de 2020 junto con el físico Rafael González, afirmaba que "el Paso a Paso es un invento del marketing necropolítico. Intenta presentar el desconfinamiento sucediendo en forma gradual, cuando en realidad ha sido siempre un conjunto de medidas improvisadas y mal planificadas. La evidencia demuestra que es otra la gradualidad que caracteriza la estrategia sanitaria desde marzo: su lentitud para tomar medidas preventivas efectivas".
Ahora, en medio de la peor crisis desde que comenzó la pandemia, Bacigalupe ratifica sus palabras: "es una estrategia que intenta evitar el colapso hospitalario, pero no prevenir la enfermedad. Estrategia costosa en vidas y que hoy demuestra su fracaso al no poder responder a la catástrofe que el mismo ministro reconoce".
Para Gonzalo Bacigalupe la estrategia diseñada por Jaime Mañalich - de contagiarnos "lentamente"- es la misma que ha mantenido Enrique Paris, quien asumió como ministro incluso con el mismo equipo de confianza de su antecesor. Por lo que descarta que la actual polémica por los dichos del ex ministro en Tolerancia Cero - que sugiere su distanciamiento de la política sanitaria del gobierno - sea real.
Por el contrario, para el salubrista "Chile es el único país con dos ministros de Salud. Algo que no contribuye en nada a la comunicación de riesgo. Así como se necesita ventilar los espacios cerrados donde habita el virus, también necesitamos airear los espacios de poder. Se necesita un giro drástico y profundo que no incluye a ninguno de estos ministros mesiánicos. Necesitamos abordar esto como la real emergencia sanitaria que es".
El académico llama directamente a la clase política a tomar acciones que salven vidas. "Porque esto es político, no se trata de evidencias ni de ciencia y nuestra clase política, incluida la oposición, parece no enterarse de que esto es un crimen por omisión o intención. Sabemos qué se debe hacer para salvar vidas pero no se hace".
- Seguimos en este gran barco piloteados por una política que no cuida - agrega -, que intenta poner torniquetes con resultados obviamente negativos. Cuando entras a una UCI alguien está esperando que mueras para ocupar la cama. Esa es la realidad. Esta micro va llena y sin dirección. Esperando que aparezca la luz al “final del túnel” o que la milla no sea tan larga. Eso es pensamiento mágico. No tiene lógica en un desastre donde mueren más de cien personas día a día.
Gonzalo Bacigalupe advierte que el autocuidado ni ningún esfuerzo individual es suficiente para detener la pandemia, "se necesita reorganizar el poder para hacer una política del cuidado de verdad. Para eso constituimos un país, para hacer las cosas en conjunto. Se necesitan iniciativas desde el estado mucho más valientes y coherentes".
El académico insistió en que ya no queda tiempo para la indiferencia del sistema político ni para juegos de poder que no tienen efecto, como fue la fracasada Acusación Constitucional contra el ex ministro Jaime Mañalich, donde él mismo fue citado como experto, ocasión en que dijo: "los errores en la gestión de un desastre se perdonan, el problema es la estrategia que contagia, enferma, y mata”,
Escrito por Lucía Escobar
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