Las imágenes de Wakolda Catrillanca, de 7 años, siendo arrestada por agentes de la PDI y el audio donde un policía amenaza de muerte a niñas de 12 años de la comunidad de Temucuicui, registro que fue autentificado por la Defensoría de la Niñez, son el estremecedor recordatorio de la violencia Estatal que han padecido los hijos del Wallmapu durante generaciones.
Para la periodista Paola Dragnic de Telesur "son decenas los niños y niñas mapuche que han sido maltratados y violentados por el Estado de Chile. Camilo Catrillanca, como muchos niños mapuche, fue vulnerado desde pequeño. Las y los adultos mapuche que hoy que viven en comunidad, son adultos que cargan con las balas de la policía chilena. Así han pasado décadas, en la complicidad y el silencio de muchos".
Frente a la indiferencia de la televisión chilena y los medios tradicionales, la prensa independiente e internacional ha expuesto las graves vulneraciones contra menores mapuche durante años.
"Son los niños las víctimas más invisibles de la represión del Estado chileno" dice Dragnic en un reportaje de 2017 sobre las consecuencias de esta represión, cuando aún parecía circunscrita a La Araucanía.
Pero tras el Estallido Social del 18 de Octubre, muchos chilenos pueden reconocer el tipo de violaciones de DD.HH. que se habla en la nota, ejemplificado en tres niños: Silvestre recibió más de 40 balines en el cuerpo; Fabiola perdió un ojo y Brandon recibió un escopetazo policial que le destruyó la cadera.
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