El día 14 de junio asumió el nuevo ministro de salud Dr. Enrique Paris. De las 12 semanas en el cargo, el nuevo ministro de salud lleva más de 10 semanas hablando de “muy leves”, “leves” o “incipientes” mejorías. En otras ocasiones ha hablado de “impresionantes” indicadores a la baja. Lamentablemente, el ministro se refiere a indicadores que incluyen a más de 250 mil casos confirmados y, la aún más trágica cifra, de más de 9.500 fallecidos* registrados desde que asumió el cargo. Hoy son alrededor de 16 mil los fallecidos por COVID-19 y se informan más de 500 personas fallecidas por semana.
Si bien, la reducción de enfermos y fallecidos en la Región Metropolitana ha sido notoria, es lo mínimo que se podría esperar pasadas más de 16 semanas desde que se decretara cuarentena en gran parte de las comunas de la RM. Sin embargo, esta medida a nivel regional, sólo se tomó para la capital, el resto de Chile vive en cuarentenas que se encienden y apagan intermitentemente sin claridad de los indicadores utilizados. El resultado, es que desde mediados de junio las regiones del norte y sur presentan un altiplano de fallecimientos semanales cercano a 300.
Hoy cerca del 50% de los fallecidos que se reportan son en regiones, sin embargo, debemos considerar algo que la autoridad parece olvidar: la movilidad de personas y la densidad poblacional en regiones es mucho menor que en la capital y, por lo tanto, el contagio. Si no se controla la epidemia considerando las características de nuestro diverso territorio, seguiremos juntando pérdidas humanas lenta, pero inexorablemente.
* Fallecidos informados por DEIS el 3 de septiembre confirmados y sospechosos de COVID-19
Escrito por Lucía Escobar
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